Deje las palabras de lado cuando los actos lo son todo, tenia que.
Respiro mi existencia, vivo, me detengo, observo y veo sentimientos en las caras cuando sus bocas pronuncian ejemplificadoras palabras, me contraigo, tomo aire, y sigo.
Yo estoy acá conmigo, idéntico me demuestro todos los días, sé que soy! , porque los zapatos que encuentro al costado de mi cama al levantarme me calzan justo en cada pie.
Cerré mis ojos, camine siguiendo la línea de las baldosas, avance metros sin ver, pero por miedo a tropezar los volví a abrir, ya había caído antes, pero esta vez, porque otra vez?
Enajenado de que el amor es para siempre, realizo actos de acrobacia, me paro en un pie y no pierdo el equilibrio, pero la demencia es tan necesaria, y no busco locura, pero tampoco me encuentra.
El destino es tan caprichoso y al origen me remito para que pueda darme una lógica proposicional y entonces yo pueda saber. Me niego a creer que no existes, te sé en mi, mientras tanto, mientras pueda, iré deshojando el almanaque
